"Voy con una trayectoria lenta
Por mucho que me mueva siempre me encuentro
En un punto dado de una esfera
Que te tiene como centro"
Por mucho que me mueva siempre me encuentro
En un punto dado de una esfera
Que te tiene como centro"
La vida se ha romantizado sin motivo aparente, de una día para otro, esta visión en grises ha aprendido a ver en colores, a levemente tibiarse.
Quizás sea lo mas extraño que de pronto mire a la gente caminar por la calle con historias en las manos, a ver a los pajaros pasar en parvada formando figuras que imagino tratan de decir algo, al ver a esa niña sujetando con fuerza su muñeca nueva, con la incertidumbre de no saber a donde la lleva su madre apurada.
Todo parece indicar que la madurez se acaba de asentar, y el estado de vista metálico acaba de procesar en colores.
Sobre si sentirme diferente no lo se con certeza, reconocer las emociones y separarlas es algo que no he logrado descifrar, todo el tiempo se siente como una mezcla pastosa de sensaciones, el punto es que desde que veo en technicolor puedo separar las claras con las obtusas, sin embargo el tacto en la mente no esta presente y todo parece un betún mezclado sin cuidado.
La visión emocional es un concepto que acabo de inventarme y apropiarme, practicandolo un poco cada que veo a grupos concentrados de gente siempre coincide el miedo con la ansiedad, y aunque suene cruel es reconfortante encontrarse con sentimientos tan ocultos expuestos en características singulares de los individuos.
Y es que aunque tratemos de ocultar nuestras emociones con cientos de caretas el miedo nunca es carente, es una esfera de vapor que acompaña a toda la gente, los empaña y otras veces los marea, no se habla de ello; y por ende los nuevos ojos asumen que no se tiene al crecer.
Pero el miedo nunca se va, amarra y encaja para no soltarse, el miedo crece y con un poco de suerte se apacigua, pero nunca se va.
El miedo es un elemento necesario de los seres.
El color del miedo es un azul índigo muy tenue, a la lejanía luce como un gris cualquiera, pero concentrando los ojos con cuidado se deja ver.
La ansiedad también esta ahí, pero se encuentra debajo, casi tocando el suelo, es una densa neblina que oculta el suelo, que fabrica un amarillo potente, es un sentimiento en continuo movimiento, son microscopicos destellos que emanan de los dedos del pie hasta el cuero cabelludo, los intervalos de ansias dependen de cada persona, su pulsar es abusivo o muy pasivo, todo depende del cuerpo habitado.
Al ver con nuevos ojos el mundo parece completamente diferente, se siente como si fueran pequeñas piezas de rompecabezas destinadas a embonar en cualquier lado, cambiando sus formas y adaptandose al grosor o delgadez del ambiente.
Cuando me detengo por momentos cerca de las personas puedo entrar en sus esferas de vapor, sentir el movimiento constante de sus vibraciones que afecta directamente a mi organismo, su temor, ira, alegría y asco se adentra con facilidad a mi cuerpo.
El cuerpo reacciona pidiendo espacio personal, concentrando una nube densa con apariencia de gelatina que me obliga a alejarme de las personas que cree que son toxicas.
La nueva habilidad ha generado un mecanismo de defensa estricto, casi una muralla impenetrable de confort altiplano.
Confió ciegamente en ella, supongo que dentro de mi esfera hay otra esfera a punto de quiebre, lo se porque se resquebraja con facilidad, y tiende a volarse al producir adrenalina.
Al reconocer sentimientos con el observar sé distinguir situaciones únicas donde las esferas se desinflan para generar una brisa constante que se libera cada tres tiempos, el suficiente para mantener la forma de la esfera, pero no demasiado para reventarla. La siento cuando la gente esta cómoda, cuando ríe y cuando duerme.
Aveces los vapores del miedo y la ansiedad compiten con la brisa de la alegría, solidificando la humedad en pequeñas gotas que lucen como semillas de manzana.
Producen ternura.
La misma ternura dejando un caminito de semillas que la niña va dejando apurada.
Acompañada de esa humareda de ansiedad que su madre viene arrastrando.
Elevandose hasta donde los pajaros emanan gotas rojas de vigor que empapan mi propia esfera.
Una pelota etérea con doble ventilacion que saborea los colores que esta gran esfera en la que vivimos produce.
"Tu y tu leve tul de nubes
Que forman de vapor su propia esfera
Perdí la cuenta de las veces que te anduve
Todas parecen la primera"
Dejo la canción del día.
Mucha suerte, Yo esferico del futuro.