"Que abandone su guarida, que ocupe su lugar en otro espacio..."
Puede que no este haciendo las cosas correctas en este momentos, que me tropiece y tarde meses en levantarme, pero asi trabajo sobre la marcha.
Y ahi mientras yo estoy en el suelo estan ustedes, con los brazos cruzados y con la cabeza diciendo que "no".
No los pedi, no los quiero cuando me cuesta trabajo levantarme, y no quiero sus preguntas ahora que estoy caminando con el pie herido, no los necesito en este tiempo de vida, no quiero que me manchen la ropa con su sarro, ni conviertan este bosque en edificios altivos, en protocolos y costumbres, en modales y en lo politicamente correcto.
Exijo mi derecho a que me dejen en paz, el poder decir que si, de saber que no importa mucho o nada, el poder de poder...
Exijo mi derecho a que me dejen en paz, el poder decir que si, de saber que no importa mucho o nada, el poder de poder...
"Existe una sola cosa en la que pienso..."
Si este juego sale mal ustedes estaran de nuevo ahi, denegando con los brazos cruzados...
Arrojando piedras, la importancia de lo banal, de lo que no tiene que ser dicho, del pensamiento que se queda como pensamiento, de sus leyes estupidas, de sus movimientos salvajes, de su extraña mirada profunda reflejando su dolor sobre mi, su triste pasado que no pudieron cambiar, de los errores que cometieron y los que estan cometiendo por mirarme...
Solo no ahora que se me desbordan las manos por los extremos, no en este momento que intento armarme como pieza de lego, de solidificarme, de suponer que dentro de sus miedos esta un frenesi derritiendo sus ansiedades.
Comiendose su alma, tratando de controlar aun sabiendo que ni siquiera fueron capaces de controlarse ustedes, de olvidar que tiraron la toalla tantas veces que sin saberlo lipiaron el piso con su lagrimas...
Abrir la boca para molestar, para no escuchar su silencio, una orquesta a base de ruidos de insectos salvajes...
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